“Este año, las reservas para enero de 2024 han experimentado un notable descenso, situándose por debajo del 5%, en contraste con el 20% habitual”, explicó José Rodríguez, gerente del Comodoro Hotel.
El gerente del Comodoro Hotel, José Rodríguez, reveló que las reservas para enero de 2024 han sufrido un significativo descenso, ubicándose por debajo del 5%, en comparación con el 20% habitual. Esta preocupante tendencia también fue resaltada por el intendente de Puerto Madryn, Gustavo Sastre, quien expresó su inquietud ante el brusco descenso en las reservas turísticas para la temporada de verano, estimando un nivel entre el 10% y el 15% para enero.
La hotelería en Comodoro Rivadavia, está marcada por un segmento corporativo durante gran parte del año. De marzo a noviembre, la ciudad recibe a viajantes, profesionales de la salud y corporativos. Sin embargo, diciembre, enero y febrero traen consigo un movimiento de tránsito, principalmente familias que hacen escala antes de dirigirse al norte o sur del país para vacaciones.
En este contexto, es importante entender las particularidades de las reservas en la región. “Históricamente, el público que visita Comodoro no tiene el hábito de reservar con antelación, prefiriendo decidir sobre la marcha, a menudo tras horas en la ruta. Este comportamiento ha sido la norma hasta 2022”.
Este año, las reservas para enero de 2024 han experimentado un notable descenso, situándose por debajo del 5%, en contraste con el 20% habitual. La situación económica del país también influyó, llevando a que aún menos personas realicen reservas anticipadas”.
Ante este escenario, los establecimientos hoteleros están adoptando estrategias para atraer a los viajeros improvisados. Se prevé que el público en la ruta buscará opciones de alojamiento en el momento. Para atraerlos, se implementarán estrategias de precios, descuentos familiares, servicios de estacionamiento y otras ofertas atractivas.
El descenso en las reservas no solo afecta a la hotelería, sino que también se refleja en la gastronomía local. Restaurantes en Comodoro han tenido que adaptarse constantemente a los cambios en los costos de productos e insumos, incluso cerrando temporalmente algunos días para reorganizar sus cartas y ajustar precios.